La obra delicada y exquisita de Brad Kunkle se caracteriza por la utilización del dorado y el plateado, combinados a la perfección con figuras principalmente femeninas que este artista pinta al óleo, en un melancólico trato con la naturaleza.
Brad vive y trabaja en Nueva York, donde pinta estas escenas extraordinarias, de envolventes mujeres cubiertas de hojas. Las hojas a menudo forman el telón de fondo de sus imágenes que funcionan como el agua, el viento, mantas, tierra o tal vez todo lo anterior.