El Cerro Paranal, es un verdadero paraíso para los astrónomos, con su impresionante cielo estable y transparente. Ubicado en el árido desierto de Atacama, Chile, es el hogar de algunos de los telescopios más importantes del mundo. Operado por el Observatorio Europeo Austral (eso.org) del Very Large Telescope (VLT) de ESO en Paranal, compuesto por cuatro telescopios de 8 metros, que pueden combinar su luz para crear un telescopio gigante por interferometría. Cuatro pequeños telescopios auxiliares de 1,8 m, cada uno, son elementos importantes del interferómetro del VLT.
Caminando por el desierto cerca de Paranal, entre las piedras y cantos rodados dispersos en el polvo de color rojo pálido se siente como si estuviéramos en Marte, pero bajo el cielo de la Tierra. Es una experiencia increíble estar bajo un cielo nocturno ideal, una belleza natural pura y virgen sin las luces urbanas. No hay muchos lugares en este planeta donde todavía se pueda experimentar un cielo oscuro como este.