“En tu luz aprendo cómo amar. En tu belleza cómo hacer poemas. Bailas dentro de mi pecho, donde nadie te ve, pero a veces yo lo hago y esa luz se convierte en este arte.”
Rumi
Miho Hirano transforma, transmite, nos inunda de paz.
Su maravillosa obra nos transporta hacia los mundos de las hadas, a su más celosa intimidad. Nos hace admirar su delicada existencia a través de la naturaleza más pastel.Esta es su obra:
Cuando el temor por el mundo crece en mí
y despierto en la noche ante el menor sonido,
preocupado por qué será de mi vida y de las vidas de mis hijos,
voy y me acuesto allí donde el pato
descansa en su belleza en el agua, y la garza real se alimenta.
Entro en la paz de las cosas salvajes
que no ponen a prueba sus vidas con la anticipación del dolor.
Entro en la presencia del agua quieta.
Y siento sobre mi cabeza a las estrellas ciegas al día
esperando con su luz. Por un momento,
descanso en la gracia del mundo, y soy libre.
y despierto en la noche ante el menor sonido,
preocupado por qué será de mi vida y de las vidas de mis hijos,
voy y me acuesto allí donde el pato
descansa en su belleza en el agua, y la garza real se alimenta.
Entro en la paz de las cosas salvajes
que no ponen a prueba sus vidas con la anticipación del dolor.
Entro en la presencia del agua quieta.
Y siento sobre mi cabeza a las estrellas ciegas al día
esperando con su luz. Por un momento,
descanso en la gracia del mundo, y soy libre.
La paz de las cosas salvajes, de Wendell Berry